Una vez, tuve un profesor, que nos habló de lo correcto y lo incorrecto, de lo que estaba bien, y lo que no, de diferenciar entre lo que se debía y no se debía hacer. No hay mucho en mi vida merezca la pena, quiero decir que no hay mucho dentro de mi por lo que merezca la pena apostar nada, pero sé lo que soy, lo que tengo, sé en lo que creo, y eso es por lo que yo apuesto. Miro al pasado y veo que las cosas han cambiado, y yo la primera, que cosas que antes no me importaban, ahora son lo primero en lo que pienso, y cosas que me parecían fundamentales han pasado a un segundo plano, me a pisado mucha gente, no sin llevarse por ello, aun empujón por mi parte, pero hay algo que siempre he mantenido, mis principios. Nuestro profesor nos dijo que lo más importante era no engañarse nunca, nos dijo que fueramos quienes quisieramos ser y no que nos dijeran, que salieramos a la calle con corazón de repuesto, que nos miráramos al espejo y nos gustara lo que viera, que nos levantaramos y nos dijeramos "Hoy va a ser un buen día", que nosotros éramos los únicos que podíamos frenarnos, los únicos obstáculos en nuestro propio camino. He visto películas, he leido libros, he querido y odiado con toda mi alma, aunque aun no se puede decir que alla llegado a amar, me he creido invencible, y unas simples palabras han podido conmigo y al final las cosas más simples y cotidianas son las que te llenan el corazón, como un guiño o un abrazo, sentimientos como el cariño o como sentirse vivo. Supongo que lo que quiero decir es: Sal a la calla, diviertete, ríe con una película, relee libros perfectos, llora, ama, odia, siente, quiere, sueña, VIVE JODER VIVE. Sé odiada, porque eso es lo que te dará fuerzas, que hablen de ti, que importa? sé loca, más que el resto del mundo, que nadie tenga nada que reprocharte, pero sobretodo que cuando llegue el fin de tus días sonrias recordando aquello que viviste, que tus mejores días son YA. Supongo que hay lecciones en la vida que te llegan de verdad, que te llegan al corazón, pero no las lecciones que te enseñan en los aulas, son las que te enseñan los golpes de la vida.
+¿Qué vas a hacer ahora?
- ¡VIVIR!
viernes, 20 de enero de 2012
sábado, 14 de enero de 2012
lunes, 9 de enero de 2012
La diferencia es que yo puedo hacerte reír con la ropa puesta.
y aun así, me siento extremadamente estúpida... y sentirse estúpida duele.
martes, 3 de enero de 2012
Y entonces me desperté...
Y a mi alrededor estaba la cruda realidad,o mejor dicho la puta realidad. Sé que no soy especial, que crees que no puedo darte nada que no pueda darte cualquier otra. Yo no soy nadie, solo soy otra chica más, otra de tantas, pero si eres quien quiero/creo que eres podrás ver todo lo que puedo ofrecer, todo lo que puedo darte. Llevo mucho tiempo al rebufo de todo, de mis amgigas, de los tíos... Siempre he seguido a alguien, siempre he esperado a que me lo dieran todo echo, a acatar normas o órdenes, a seguir a quien tocaba, a besar a quien me lo pedía, pero todo eso se acabó, supongo que he cogido al mundo por los huevos, ahora tengo mis decisiones en mis manos, aunque eso me asuste, pero es lo que realmente importa. Tengo el valor suficiente para hacer cualquier cosa, tengo las facultades, y por supuesto la confianza, y por eso me gustas tú, porque no me lo pones fácil, nada fácil, no me has hecho ser nadie que no quisiera ser, soy exactamente quien quiero ser hoy. Así que si lo que me preguntas es porqué me creo mejor que cualquier otra es porque soy yo, coño SOY YO, la que se ríe de tus chistes malos porque le hacen gracia de verdad, la que te pone en su sitio cuando lo necesitas, la que te dice las cosas claras la que nota un guisante bajo un colchón y no se vende barata, pero sobre todo la que jamás te va a vender a ti, la que te a/va a defender hasta quedarse sin voz, la que va a estar ahí. Pero no puedo garantizarte que vaya a estar siempre, puede que me quede toda la vida o puede que mañana ya no me acuerde de ti, eso no lo sé, porque no sé lo que me espera mañana, y porque hay mil opotunidades por ahí
Ya nadie nota un guisante debajo del colchón.
A mi me flipan los tios que fuman, y que se les marcan las venas en los brazos, que llevan pendientes y tatuajes, y que dicen: eh, no toques a mi piva, pero no te confundas, no hablo ni de querer ni de sentir, porque ambos sabemos perfectamente que tú ni sientes ni padeces. También me gustan los tíos decididos, que me hagan romperme la cabeza de vez en cuando, aunque nos tengamos que volver locos para ponernos de acuerdo, que no me de la razón, y pero sobre todo que cada vez que me hable me recorra un escalofrío por la espalda. Un tío que me sepa llevar, que cuando de mire, se pare mi mundo, y pero que sea capaz de volvera ponerlo en funcionamiento con un simple pestañeo, un tío que me haga reír, que me haga reír todo el tiempo, que no se arrastre, aunque eso me haga sufrir en ocasiones, que sea muy orgulloso, casi tanto como yo, un tío que tenga a más chicas detrás, pero que sepa escoger a la que siente el guisante debajo de su colchón. Que tenga moto, porque me encanta la velocidad, que salga beba, se divierta, que no deje su vida porque yo esté en ella, que se enfade si le vacilo, pero que tenga la sonrisa más acogedora del mundo. Un tío que esté loco, que no le importe si los demás follan o fallan, que sea un chulo, y un flipado, pero que me quiera, que me quiera mucho, y que me vaya a cuidar, que entienda que yo no soy fácil de tratar. Alguien que me incite a hacer locuras en ocasiones, que agarre fuerte mi mano si viene el miedo, que convierta un simple conchón en una suit de lujo, como si se acabara cada noche el mundo. Que me prometa que voy a volar sin necesidad de tener alas, y que las noches... No son tan largas.
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